Se ha iniciado una actividad, que pretende regenerar y equilibrar una pacela de la finca, en la que el exceso de humedad está provocando la podredumbre en algunas de las plantas allí presentes. Con este fin, recolectamos las cañas muertas de las lindes de la finca, y tomando como referencia un joven nogal, se diseña una especie de mandala con los bancales. Los espacios marcados se rellenan con dichas cañas, y una vez cubiertas con paja, se siembran plantas que nos ayuden a regenerar y crear suelo: borrajas, ajos porros, caléndulas y dientes de león (trasplantados de otras zonas de la finca).
Fotos: Marta F./Peter